Internet se ha convertido en una ventana abierta al mundo. A través de ésta se puede llevar la mirada hacia un sinfín de información. La importancia radica en la existencia de un flujo libre y no controlado de dicha información. Esta es la principal preocupación, por lo que se intenta encorsetar cada vez más los contenidos que se distribuyen en la red. Pero esto es una incongruencia, ya que la misma condición del sistema lleva implícito su volatilidad. El objetivo es el intercambio de información y cualquier impedimento, en mayor o menor medida, se puede salvar.
La sociedad actual ha conocido una nueva manera de ver películas, escuchar música, leer la prensa, comprar en el supermercado, enviar correspondencia, hacer reuniones de trabajo, realizar compra-ventas, etc. Hemos cambiado nuestra forma de vida, y en el campo cultural, nuestra visión del mundo se ha ampliado. ¿Nos hallamos delante de una cambio de paradigma?
La sociedad es variada y cambiante, de la misma manera que debe ser la cultura a la que tiene acceso. Restringir la cultura, es restringir la formación del sujeto y por extensión la de toda la humanidad. La piratería en Internet no puede ser una lanza de fuego que ahogue la difusión de la cultura. Creadores y consumidores de la creación no pueden ver sus horizontes distanciados en pos de un mercantilismo feroz.
jueves, febrero 15, 2007
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